En la actualidad estamos inmersos en un mundo que esta en constante movimiento, donde los conocimientos están permanentemente renovándose y donde no queda tiempo para nada, estamos en la era del aquí y ahora; pero ¿Es posible combinar esta realidad con la lectoescritura?, ¿Cuándo fue la última vez que te has detenido a leer un libro y no has parado hasta terminarlo?, ¿Cuántas veces en tú vida has escrito una historia o algo que exprese lo que sientes, sin que nadie te obligue a hacerlo?


Nuestro blog busca hacer un paréntesis. Crear un espacio donde interactúes directamente con los libros y con lo que ellos quieren expresarte.

Queremos fomentar la lectoescritura con significado y recuerdes que eres tú el que construye el sentido de un texto a partir de tus propios conocimientos sobre su contenido y tus propósitos para leerlo.

También que estés conciente de que nunca es demasiado tarde para crear hábitos de lectura, comprensión y producción de textos, este es un tema donde todos estamos invitados a participar sin importar nuestra edad.

viernes, 5 de noviembre de 2010

La lectura es el hábito que más se pierde entre la niñez y la adolescencia

Publicado el por la bibliotecaria al día

Un estudio norteamericano y otro chileno concluyen que los adolescentes no tienen incorporado buscar entretención en los libros.
En una primera mirada, Javiera (12) es una niña como cualquiera: tiene a casi todo su curso en Facebook, hace las tareas con el chat encendido y considera que la película Camp Rock es una mala copia de High School Musical. Hay un punto, eso sí, en que la Javi marca distancia con sus congéneres: le encanta leer libros. Se entretiene con ellos. Los disfruta. Durante el año escolar, debe dejar atrás una lista de textos que el colegio le impone, pero ella los lee en las vacaciones de verano y llega a marzo con la tarea resuelta.
Su costumbre de buscar entretención en la lectura viene de chica y se acrecentó con los años. Algo que no le ocurre en general a los niños: el hábito que más pierden cuando pasan a ser adolescentes es la lectura de libros. Así se desprende del Kids and Family Reading Report, desarrollado por la editorial Scholastic y el Harrison Group: entre los seis y los ocho años, el 56% de los niños lee libros con el afán de entretenerse. A los 15, sólo el 24% conserva esa costumbre. ¿Qué prefieren? Usar el celular, ver televisión o películas, navegar por internet y jugar videojuegos. Esos datos también tienen representación en la realidad chilena. El estudio Escuela y Familia: Su influencia en la formación para lectores del mañana, de Fundación La Fuente, dice que a los 10 años, el 29% de los niños lee libros para entretenerse y a los 14 años, sólo el 12%. En la vereda opuesta, navegar por internet crece de 45% a 69% en ese lapso y ver televisión, de 43% a 48%.
¿Donde está la clave? Precisamente en la búsqueda de entretención. “La lectura debe ir de la mano con pasarlo bien”, dice la experta en sicología de la Educación de la U. Católica, Malva Villalón. Sin embargo, la lectura de un libro como sinónimo de entretención no es un concepto incorporado. “Es una situación que se traspasa de padres a hijos en los hogares chilenos y que los planes de fomento lector de los colegios han reforzado al hacer de la lectura de libros parte de las obligaciones escolares”, insiste Villalón. Los niños acusan el golpe de esa obligatoriedad. Cuando se les pregunta qué es lo que menos les gusta de la lectura, la respuesta mayoritaria es “sentirme obligado a leer” (41%). “A pesar de que en los actuales planes de lenguaje y comunicación no está presente el concepto de lectura obligatoria y no entrega, además, un listado de libros a leer, aún está presente en muchos docentes. Y los listados de libros siguen siendo los mismos que hace tres o cuatro décadas”, agrega Claudio Aravena, profesor de Lenguaje y gerente de proyectos sociales de Fundación La Fuente.
Ahí hay otro punto que aleja los libros de los niños: el 23% dice que le disgustan los temas que le dan a leer. “Los buenos libros son la clave”, dice Villalón. “El éxito de Harry Potter es una demostración de que la falta de interés en los libros de los preadolescentes puede revertirse. Las novelas de vampiros, de Stephenie Meyer, de gran éxito entre adolescentes y jóvenes, son otra prueba en este sentido”.
El escenario es complejo. El Kids & Family Reading Report acusa la irrupción de la tecnología en el mundo de la entretención infantil. ¿Deben competir con los libros? Villalón responde que no. Que un buen libro permite abstraerse y construir el amplio escenario interior donde cobran vida los personajes y las escenas. Permite, en el fondo, entretenerse. Y eso lo que quieren los niños (40,3%). Además, son ámbitos que pueden complementarse y en el desarrollo de libros los electrónicos puede ser un camino. “Si la tecnología es capaz de desarrollar libros con imágenes 3D o cuentos con links a videos, trailers, películas, el interés crecerá. A los niños y jóvenes le gustan los mundos fantásticos, los personajes de otra época, la acción insospechada de una historia. Eso claramente se puede apreciar en un videojuego. ¿Por qué no se acercan a los libros del mismo modo?”, dice Aravena.
En la tarea de revertir esta realidad no es sólo del colegio. Los estudios en Chile indican que los adultos no son buenos lectores. Los niños dicen que tienen pocos libros en sus casas. Los niveles de iniciación temprana a la lectura en Chile están por debajo de los países desarrollados. Y la Encuesta de Primera Infancia dice que un 40% de los padres nunca lee ni cuenta historias a sus hijos preescolares. “Necesitamos de una generación de adultos que disfruten de la lectura y estén dispuestos a compartirla con sus hijos no como un medio, sino como un fin. Lo demás -la mejora del vocabulario, el conocimiento, la lectura y la escritura- vendrá por añadidura”, concluye Villalón.
José Miguel Jaque – latercera.com


Importancia de la lectura y su comprensión

La lectura es un factor clave de comunicación, por ello es necesario tener una buena comprensión de lo que se lee. La comprensión de la lectura requiere una construcción mental, cada palabra y frase debe imaginarse o representarse de algún modo para poder entenderse. Es un proceso de construcción de significado que realiza cada lector para responder a sus intereses. El lector que lee con interés y que se formula preguntas pondrá en juego todo su esfuerzo, conocimientos y habilidades para encontrar las respuestas que busca. Comprender un texto es ser capaz de encontrar en el archivo mental (memoria) la configuración de esquemas que permiten explicar el texto adecuadamente.
El libro entrega valores, conocimientos y sensibilidades, es un estímulo a la creatividad, y proveerá al pequeño lector de herramientas para su adaptación en sociedad y su formación como ser humano.

Factores que influyen negativamente en la lectura


  • Pertenecer a hogares, donde los padres no son lectores, ni proporcionan a sus hijos materiales que estimulan la lectura.
  • Las evaluaciones y análisis áridos de los libros.
  • Profesores que no leen a sus alumnos
  • Bibliotecas poco variadas y poco acogedoras.
  • La presencia absorbente de la T.V, juegos de video o computador
  • El 13.8 % de los hogares chilenos, no poseen libros
La lectura entrega un vocabulario, y un conocimiento del idioma que permite la comunicación, expresión de ideas, lo que contribuye a construir una sociedad integrada. Además activa la imaginación, mediante la visualización que se hace del contenido de los textos.
Cuando se lee, entramos a nuevos mundos, se revelan nuevas zonas internas para caminar sobre ellas. Teniendo una buena comprensión de lo que se lee ,se podrán articular aquellas sendas por donde viajan nuestros pensamientos, en estos caminos que han nacido desde nosotros se cultiva el alma, la concentración y se genera reflexión.

ALGUNAS PISTAS O CAMINOS PARA ORIENTAR TU PROCESO DE LECTURA COMPRENSIVA



Te sugerimos algunas ideas planteadas por solé (1999) para desarrollar este camino:


a. ANTES DE LA LECTURA


· ¿Para que voy a leer? (Tienes que determinar los objetivos de la lectura, por ejemplo: para aprender, para entretenerme, para elegir una opción que me convenga, para fundamentar una crítica a una teoría, etc.).

· Para comenzar a leer un libro, ante todo, realiza una primera ojeada del texto, para ello:
  • Mira en primer lugar el título y lee rápidamente el índice.
  • Lee en cada capítulo: títulos, subtítulos, lo que aparece en itálica o en negrita, cuadros, gráficos.
  • Lee ahora en cada capítulo, los primeros y últimos párrafos, también los resúmenes, que puedan aparecer al final de cada capitulo o del libro.
  • Formula preguntas sobre lo leído
· ¿Qué sé de los temas o contenidos que se trata este texto? (Activar el conocimiento previo, qué sé yo del tema, qué he escuchado o leído sobre él)

· ¿De qué se trata este texto? ¿Qué me dice su estructura? (Formular hipótesis y hacer predicciones sobre el texto).

Si estas leyendo un capítulo de un libro es necesario que sepas a qué libro y autor pertenece ese capítulo, como el año en que ha sido escrito. Todo ello para ubicarse en un contexto general, que permita activar conocimientos previos.

  1. DURANTE LA LECTURA
Después de que hayas hecho esa primera lectura inspectiva, que te permite ubicarte en el tema y en los posibles contenidos, puedes empezar a leer con detención el texto. Estás ahora en condiciones de comenzar a leer cada capítulo en forma completa.

A medida que vayas leyendo:

·        Aclara posibles dudas y responde tus preguntas
·        Relee partes confusas.
·        Para asegurar la comprensión, expresa tus pensamientos en voz alta.
·        Crea imágenes mentales para visualizar descripciones.

Para comprender es importante, en primer lugar, conocer el significado del léxico, del vocabulario que aparece en el texto y llevar a cado una buena descodificación de éste, es decir, de traducir, de entender cada palabra, pero como lo hemos dicho, más importante todavía, es captar el sentido del texto.

Si tienes dificultades para entender el significado de varias palabras, puedes buscarlas en diccionarios –dependiendo de la temática del texto, podrá ser un diccionario común, una enciclopedia, un diccionario filosófico, psicológico, sociológico o de otra especialidad-, si no entiendes solamente alguna palabra, trata de captar el sentido general del texto y después podrás buscar el significado de la misma. Comparte con tus profesores y compañeros /as tus dudas. Recuerda que solamente debes acudir al diccionario después de haber intentado comprender el significado de las palabras considerando el contexto en el cual están insertas.

Las siguientes preguntas te permitirán verificar si estás entendiendo o no lo que lees:

  1. ¿Hay palabras que no comprendo?
  2. ¿Hay información que no está de acuerdo con lo que yo sé de antes?
  3. ¿Hay algunas ideas que queden sueltas porque no puedo establecer de qué o de quién se está hablando?
  4. ¿Hay algunas ideas que queden sueltas porque no puedo determinar cómo están conectadas entre sí?
  5. ¿Hay ideas que parecen contradecirse entre sí?
  6. ¿Hay información faltante o no explicitada claramente?

  1. DESPUES DE LA LECTURA
Puedes verificar que has comprendido un texto cuando eres capaz de expresarlo en forma ora lo escrita. Para ello deberías poder:

    • Poder expresarlo con tus propias palabras.
    • Distinguir las ideas principales de las secundarias.
    • Determinar las relaciones fundamentales que se dan entre los elementos esenciales de un texto: cómo se enlazan las ideas principales.
    • Hacer un resumen, esquema o mapa conceptual donde aparezcan los elementos esenciales y sus relaciones básicas.


C. Alcaide, C. Rosas, M. Silva, (2004), “leyendo para comprender”, Ediciones Universidad Católica Silva Henríquez, primera edición, Pág.22-23-24, Santiago de Chile